El estudio demostró que las acciones en actividades de caridad activan los sistemas neurales en igual magnitud que si recibieran recompensas monetarias.

EL ALTRUISMO EN EL FUTURO

Por; EGD Jaime Humberto Solano Ruiz 

 

En el libro de Andrés Oppenheimer intitulado SALVESE QUIEN PUEDA, se hace un análisis de los trabajos que actualmente existen en el mundo y de como muchos de ellos desaparecerán en el futuro como ya otros lo han hecho. El libro hace un análisis de 10 trabajos a futuro:  periodista, operación de restaurantes, servicio en supermercados y tiendas, banqueros, abogados, contadores, aseguradores, médicos, docentes, manufactureros, transportistas, actores, músicos y deportistas.

Pero nos causa, grata sorpresa encontrar en su capítulo de trabajos del futuro, un análisis sobre el Altruismo partiendo de esta reflexión: “Hacer el bien activa algunos sectores de nuestro cerebro que causan placer”. Para ello hace un análisis de un artículo publicado en la revista Nature denominado Dar es Bueno. El artículo se refería a un estudio de Neuroimagenes en la que se le pidió a varias personas que tomaran decisiones sobre su actuar en una obra de caridad o no, mientras eran sometidos a una resonancia magnética de su cerebro. El estudio demostró que las acciones en actividades de caridad activan los sistemas neurales en igual magnitud que si recibieran recompensas monetarias.   El autor del libro complementa su análisis con escritos de Facundo Manes, un neurólogo clínico y autor del libro “Usar el Cerebro” que manifiesta que: “ser generoso, ser altruista y hacer el bien activa los mismos sistemas de recompensa del cerebro que se activan con la cocaína, la hamburguesa con queso o con el dinero.”  Termina su análisis considerando que los seres humanos hacemos el bien por motivos de reputación porque considera que al ser admirados nos produce más placer.

Con base en esta visión, quienes tenemos como proyecto de vida pertenecer a ROTARY INTERNATIONAL entendemos que este placer nace de la vivencia fraterna con nuestros compañeros de Club con quienes forjamos lazos de amistad que perduran con el tiempo y que nos motivan a trabajar en grupo, una acción social que genere alternativas sostenibles a futuro, en toda una comunidad. Este placer conlleva un interactuar que se convierte en escuela de vida para cada Rotario porque nos enseña a comprender, a ser solidario, a reconocer a los demás en su actuar ético y profesional o comprender que pensar distinto no nos hace enemigos. 

Si logramos entender que nuestra vida requiere de placeres que nos hagan felices, entenderemos con suficientes argumentos como el Ser Rotarios es un Placer para toda la vida.

PARTICIPE Y COMENTE ESTA PUBLICACIÓN