Por; María Manuela Córdoba Aguirre - Representante Distrital RY21-22

Cuando alguien dice “nuestra fuerza reside en nuestras diferencias” se refiere al poder de la diversidad.  Si uno perteneciera a un grupo de personas, todas del mismo grupo de edad, niveles de ingresos similares, mismo origen étnico y todas viviendo en la misma comunidad, se daría cuenta de que sus puntos de vista e ideas son muy similares.  La ventaja de un grupo más diverso es que cada individuo puede aportar una experiencia vivida que es obvia para él pero completamente nueva y sorprendente para los demás. ¿Quién sabe qué soluciones pueden surgir de ello? Por eso mi primera pregunta se basa en esa misma afirmación. “La fuerza reside en las diferencias y no en las similitudes”.

Gracias a la increible oportunidad e invitacion por parte de Gladys Maldonado, admirable rotaria,  al Instituto Rotario Zona 25ª, pude reflexionar sobre las acciones que realizamos como voluntarios para fortalecer la diversidad de nuestra organización, porque a veces creemos que estamos realizando acciones mas empáticas pero en realidad debemos tener en cuenta que estas se basan en el respeto de las opiniones de todos los socios de nuestros clubes, en buscar crear espacios para que todos se expresen sobre temas que preocupan mucho en el mundo, somos una organización que trabaja por la inclusión y tenemos que estar preparados para ello, además de realizar reuniones e invitar a personas que conozcan estos temas.

Estoy segura que como organización estamos creciendo cada día y enfocando nuestros proyectos y reuniones a crear espacios más inclusivos, creo que aún nos queda mucho camino por recorrer y cambiar la mentalidad de las personas no es fácil, pero con el ejemplo podemos lograrlo, como rotarios tenemos un papel fundamental en la construcción de la diversidad y la inclusión, somos responsables del futuro de la humanidad y estamos pregonando los valores de nuestra organización, por lo que debemos ser coherentes y prepararnos para lo que la organización espera de nosotros.

Un ejemplo de cambio es cuando nos referimos desde nuestro vocabulario dependiendo de las características de las personas, en vez de llamarlas por su nombre, si decimos (el blanco, el negro, el alto, el flaco) ya estamos poniendo una barrera en el lenguaje, que bueno es llamarnos por nuestro nombre y hacer la diferencia de quienes somos, por eso la diversidad nos une y debemos trabajar para lograrla.

Rotary cuenta con clubes en todo el mundo y, a través de sus proyectos de servicio, llega a una amplia gama de personas, por lo tanto, ya somos diversos, pero un segundo ingrediente, la inclusión, esta es la clave para desbloquear y mantener todos los beneficios que ofrece esta diversidad.

Yo aprendo el lengua de señas desde que era niña y me he interesado por aprender otras actividades que me ayuden a trabajar por la inclusión, para mí ese concepto va más allá de aceptar al otro, se trata de aprender lo diferente, se trata de la tolerancia y de ser más empáticos, si todos trabajamos por aprender sería un mundo más inclusivo y con igualdad de oportunidades para todos.

 El pasado 23 de septiembre celebramos el dia de la lengua de señas y nada mas gratificante que ver a muchos Rotaract de nuestro distrito interesados en aprenderla, mis sentimientos de admiracion a Santiago Sanchez de Rotaract Armenia por conocerla e interesarse por aprenderla y enseñarla, asi como diversos clubes como Rotaract Subachoque, Rotaract Pereira, Rotaract Pitalito entre otros, que trabajan en fortalecer el tema de inclusion en sus obras, y mi gratitud a Rotaract Sogamoso donde participaron Rotarios en videos de lengua de señas, finalmente las gracias desde el corazon a todos y cada uno de nuestros clubes porque estoy segura que sobresalimos por llevar en alto esta politica sobre diversidad, equidad e inclusion en Rotary International.